21 AL 23 DE OCTUBRE DE 2016
IX JORNADAS DE LA NEL
Las Conversaciones

El niño, hoy
por Adolfo Ruíz

"La institución familiar oculta, pone un velo,
disimula el traumatismo que está en el centro
de toda formación humana: el goce".
É. Laurent

Es un hecho que quienes entran en análisis se ven llevados de manera irresistible, a hablar de su padre y su madre, a referirse a cuestiones que tienen que ver, de una u otra forma, con la manera como han sido educados por su familia. Ello implica que al hablar de niñas, niños y adolescentes, no lo podamos hacer en abstracto, sino que debamos tomar en cuenta el "tipo de madre" y el "tipo de padre" que tienen, según la expresión que utiliza Lacan en la "Conferencia de Ginebra sobre el síntoma",[1] al abordar de nuevo el caso Juanito.

El psicoanálisis señala, sin embargo, que si bien el tipo de padre y de madre tienen consecuencias para los hijos, no es posible establecer una relación causa-efecto a partir de los padres y de la familia en cuanto a lo que podemos constatar en la clínica del caso por caso, en el el campo de trabajo con niños y adolescentes. No se trata, por supuesto, del entorno social y de las características culturalmente asignadas al lugar del padre, de la madre y de la familia. Se trata, en consecuencia, de procurar apuntar a aquello de los padres y de la familia que se pone en juego, más allá de las grandes transformaciones que esta ha sufrido a lo largo del tiempo.

Así, algunas de las situaciones que observamos hoy en la clínica con niños y adolescentes, hacen que nos preguntemos por el lugar que estos ocupan para sus padres, en el contexto del complejo entramado de relaciones que estructura a la familia hoy.

Es posible afirmar que Introducción del narcisismo nos da una indicación precisa del lugar en el que Freud sitúa al niño para sus padres: la pareja parental lo sitúa como Ideal del Yo. "His majesty the baby" es la expresión que señala la hiperestimación de la que es objeto. Tal como lo afirma Germán García: "Se trata del niño como inmortalidad de los padres, niño que se vuelve esclavo del deseo del Otro".[2]

Este niño freudiano, niño del ideal, aunque no ha desaparecido completamente, ha dado lugar de manera progresiva a otro niño, a un niño al que la enseñanza de Lacan nos muestra ubicado de manera diferente. Lacan se interesó, incluso antes del comienzo de su enseñanza, en la importancia de la familia en la estructuración de la subjetividad,[3] y desde esta época empieza a releer y a situar nuevas perspectivas en los postulados y desarrollos freudianos. Más adelante, a la altura de los Seminarios 4 y 5, introduce el examen de la inscripción del niño en la familia en el contexto de lo que nos dio a conocer como Nombre-del-padre y metáfora paterna. Más adelante, en 1989, en su breve pero densa Nota sobre el niño,[4] Lacan avanza en este examen. En dicha Nota se afirma que "El niño realiza la presencia de eso que Jacques Lacan designa como el objeto a en el fantasma". Es decir, que lo que se destaca es que el niño no es tomado en relación con el Ideal, sino en el goce, el suyo y el de sus padres.

La Nota señala además que el hecho de que la familia conyugal se mantenga y se sostenga en la evolución de las sociedades, aún en función de residuo, "resalta lo irreductible de una transmisión –perteneciente a un orden distinto al de la vida adecuada a la satisfacción de las necesidades- que es la de una constitución subjetiva, que implica la relación con un deseo que no sea anónimo".

En tanto que objeto a, el niño tapona lo que en la madre es del orden de la falta. Éric Laurent afirma que es a partir de la manera en que el niño es el objeto de goce, no solamente de la madre, sino de la familia y más allá, de la civilización, que la familia se constituye.[5]

En el Seminario 19, …o peor, Lacan articula el problema de la familia al hecho de que en el Otro hay una falta. Y es en este Seminario donde encontramos la referencia al objeto a que el niño realiza.

La condición de objeto a del niño, afirma Vilma Coccoz,[6] reclama, por múltiples motivos, una reflexión especial en nuestra época, en la que, de un lado, la tecnología alimenta fantasmas y promete posibilidades en las que el niño es situado como un objeto más en una cadena de producción, y de otro, el debilitamiento del orden simbólico y el empuje deslocalizado al goce pueden hacer al niño proclive a quedar colocado como objeto de arrebatos pasionales de diverso cuño.

Es en esta perspectiva del objeto a que el niño realiza, que podemos pensar los (des)amores violentos con los que la clínica nos afronta en ocasiones.

Podríamos pensar, del lado de lo que llamamos amores violentos, aquellos vínculos en los que el niño está situado como objeto en una estructura movida por lo que Laurent ha llamado un "familiarismo delirante" [Soy tu padre/madre, te gobierno y se lo que te conviene]. El deber y la responsabilidad del padre/madre son el velo del goce en juego. Otra perspectiva es la que se presenta cuando la función que separa al niño del deseo de la madre no está, por algún motivo, asegurada. Allí, afirma Silvia Salman,[7] el niño está expuesto y capturado de manera absoluta por la fantasmática materna. El amor y el sacrificio suelen velar la dimensión del goce presente en este tipo de relaciones.

NOTAS

  1. Lacan, J., Conferencia en Ginebra sobre el síntoma. Intervenciones y textos 2. Buenos Aires: Manantial, 1988. Pág. 128.
  2. García, G., "Infancia: niños/niñas". En: Psicoanálisis con niños. Centro Pequeño Hans. Buenos Aires: Editorial Atuel/Anáfora, 1995.
  3. Lacan, J., Los complejos familiares en la formación del individuo. En: Otros escritos. Buenos Aires: Paidós, 2012. P. 33-96
  4. Lacan, J., Nota sobre el niño. Op cit. P. 394-395
  5. Laurenta, E., Las nuevas inscripciones del sufrimiento en el niño. En: Psicoanálisis con niños y adolescentes. Lo que aporta la enseñanza de J. Lacan. Buenos Aires: Grama, 2007.
  6. Coccoz, V., Hacerse su familia. Revista electrónica Cita en las diagonales, revista de psicoanálisis y cultura. Disponible en: http://www.citaenlasdiagonales.com.ar/escritos_hacerse_su_familia.php
  7. Salman, S., Las modalidades del síntoma en el niño: la acción de los padres. En: Psicoanálisis con niños. Los fundamentos de la práctica. Buenos Aires: Grama, 2004. P. 157
NEL - Nueva Escuela Lacaniana